Dra. Ma del Carmen Gutiérrez Castorena
- ¿Cómo te interesaste por primera vez en las ciencias del suelo?
- ¿Quién o quienes te motivaron a estudiar las ciencias del suelo?
En 1985, una semana después del terremoto, hice
mi solicitud al programa y me asignaron
como consejero al Dr. Heriberto Cuanalo de la Cerda y como asesores al M.C.
Huberto Quiñonez y la Dra. Klaudia Oleschko. El maestro Quiñones, un profesor
ya de edad avanzada, fue quien me enseñó Mineralogía, Geología y Geomorfología.
Mi relación con él fue una agradable experiencia; grandes charlas y aventuras
en nuestras salidas de campo. Me encantaba que me explicara la génesis de los
Tepetates, materiales volcánicos; sin embargo, pronto nos dejó. la Dra. Oleschko fue quien me introdujo al
estudio de la Micromorfología de Suelos y se convirtió desde entonces en mi
gran pasión! Durante la maestría, pasaba
muchísimas horas viendo secciones delgadas bajo el microscopio, ver los
minerales, la materia orgánica, los agregados y me llenaba de muchas dudas y
preguntas del por qué se repetían algunos rasgos y en otros suelos no se
presentaban. Esta gran motivación del suelo a escala microscópica hizo que la
Dra. Oleschko me contrata como su ayudante en el Postgrado de Edafología. En
los 90s, ella invitaba a muchos científicos especialistas en suelos y tuvimos
el honor de que nos visitara e impartiera cursos de micromorfología el Dr.
Nicolas Federoff, profesor francés y coautor del manual para la descripción de
secciones delgadas. En este libro participaban otros autores europeos como el
Profesor Stoops. El Dr. Federoff nos regaló el libro y decidí traducirlo para
comprenderlo mejor, acción académica que me abrió después las puertas con el
Prof. Stoops.
- ¿Quién o quienes te ayudado a formarte como edafólogo?
Una mención aparte es,
el Dr. Carlos Alberto Ortiz Solorio, un excelente edafólogo mexicano, y quien
también ha sido fundamental en mi formación académica. Desde la maestría me enseñó a ser
disciplinada y analizar sistemáticamente los datos de los perfiles de suelos;
me mostró que la clasificación de suelos era muy fácil si comprendías los
factores y procesos de formación de suelos. Él y yo hemos tenido muchísimas
horas de salidas al campo, discusiones y análisis de datos y siempre me ha
impulsado y motivado a crecer más como investigadora. Considero que hemos hecho un buen equipo
estudiando al suelo de manera multi-escalar.
Fueron varios, pero me concentraré en tres. Cuando regresamos a México tras la estancia en Gante, Conacyt suspendió todos los apoyos para estudiar en el extranjero y sólo daban becas en el país. El profesor Stoops aceptó continuar dirigiéndome, así que entré al Programa de Edafología del Colegio de Postgraduados. La propuesta era hacer un doctorado mixto, lo cual ya era posible pues con el correo electrónico, la comunicación se convirtió en algo muy rápido e inmediato. Mi investigación fue sobre los suelos del ex-lago de Texcoco; inicié con las acumulaciones de carbonatos y los rasgos que se forman en las antiguas playas, y terminé con los materiales amorfos silíceos, un tema que me apasionó muchísimo pues a través de una hasta literatura descubrí que era un sedimento único en el mundo. Además, me permitió comprender el porqué de los hundimientos de la ciudad de México y comenzar a alertar del impacto ambiental de destruirlo y de lo peligroso que era drenarlo por completo si se construía ahí en nuevo aeropuerto. Mi tesis cristalizó con cinco publicaciones científicas, las más importantes en las revistas Catena y Geoderma.
Fueron varios, pero me concentraré en tres. Cuando regresamos a México tras la estancia en Gante, Conacyt suspendió todos los apoyos para estudiar en el extranjero y sólo daban becas en el país. El profesor Stoops aceptó continuar dirigiéndome, así que entré al Programa de Edafología del Colegio de Postgraduados. La propuesta era hacer un doctorado mixto, lo cual ya era posible pues con el correo electrónico, la comunicación se convirtió en algo muy rápido e inmediato. Mi investigación fue sobre los suelos del ex-lago de Texcoco; inicié con las acumulaciones de carbonatos y los rasgos que se forman en las antiguas playas, y terminé con los materiales amorfos silíceos, un tema que me apasionó muchísimo pues a través de una hasta literatura descubrí que era un sedimento único en el mundo. Además, me permitió comprender el porqué de los hundimientos de la ciudad de México y comenzar a alertar del impacto ambiental de destruirlo y de lo peligroso que era drenarlo por completo si se construía ahí en nuevo aeropuerto. Mi tesis cristalizó con cinco publicaciones científicas, las más importantes en las revistas Catena y Geoderma.
Otro más de índole
laboral fue que a otro compañero y a mí nos rescindieron nuestros contratos, y
nos obligaron a renunciar a la beca del Sistema Nacional de Investigadores. Al
final me quedé sin remuneraciones económicas, pero me obligó a acelerar aún más
mi formación académica y logré terminar mis estudios doctorales en 2 años 10
meses.
El otro problema
fueron mis intensas migrañas que me daban tres días por semana y que me
limitaban en cierta manera en concentrarme hasta en cuestiones básicas.
Recuerdo que el Dr. Jorge Etchevers, profesor de Edafología del CP, me preguntó
en una plática informal sobre una disolución y no pude responderle. ¡Me dio
tanta pena! Mi problema de salud duró al menos 10 años, pero al final
descubrieron que se debían a alergias y fue un gran alivio.
5. Cuéntanos alguna anécdota sucedida durante tus estudios de doctorado.Como señalé, hice un doctorado mixto de tal forma que la investigación la realizaría en México y todos los análisis de laboratorio en la Universidad de Gante. Cuando regrese a Bélgica, con 30 años de edad, era la única casada en el “home” y con hijas, de cuatro y cinco años de edad.
La separación de mi
familia fue durísima para mí y lo que menos quería era estar en mi cuarto, así
que pasaban el mayor tiempo en la Universidad.
En las tardes, cuando
prácticamente el departamento estaba sólo, en el cubículo de enfrente trabajaba
un profesor ya grande, que tenía una fuerte tos y prácticamente se ahogaba
todas las tardes, por lo que sentía que se iba a morir. Aunque, le llevaba té o
agua nunca o le abría las puerteas del instituto pues eran muy pesadas, nunca
me dio las gracias o me dijo buenas tardes.
Mucho tiempo después supe que este profesor era un edafólogo muy famoso
de origen judío, pero su hostilidad hacia conmigo era que creía que yo era
palestina. ¡Fue una lástima, no tener
intercambios académicos con él!
- ¿En qué tema edafológico estás pensando ahora?
Siempre he sido muy
inquieta e hiperactiva pues suelo analizar varios temas a la vez. Ahora estoy
trabajando en micro cartografía de secciones delgadas, utilizando sistemas de
información geográfica, suelos afectado por incendios forestales y suelos de
zonas áridas.
7. ¿Qué artículo reciente ha atrapado tu atención y por qué?Hay muchos que me encantan y los puedo leer y releer. Los temas son también variados, pero siempre relacionados con suelos. Me atrapa mucho estudiar a los agregados del suelo de los diferentes tipos de suelos y es mi tema favorito en mis clases de Edafología, así que todos los artículos que salen sobre este tema, son rápidamente consultados y analizados.
- ¿Qué gran problema le gustaría abordar en los próximos 10 años?
-
9. ¿Cómo le gustaría que en el futuro fueran enseñadas y aplicadas
las ciencias del suelo? Ojalá que en un futuro
inmediato tengamos más presupuesto para salidas al campo, y tengamos la
oportunidad de mostrar toda la edafodiversidad que hay en nuestro país. Además,
es muy importante tener más contacto con productores, e intercambios académicos
con otras universidades.
Pese a los pocos
recursos con que los investigadores contamos, considero que algo hemos estado
haciendo bien, pues he visto con gran beneplácito, el incremento de jóvenes
edafólogos formados en muchas universidades e institutos de investigación de
nuestro país. Nuestros jóvenes son ahora mucho más prácticos y proactivos que
nosotros y están participando de manera entusiasta en foros nacionales e
internacionales y considero que tendrán en un futuro cercano un mayor impacto
en las políticas públicas que nosotros.
Licenciatura: Facultad de Biología,
Universidad Autónoma de Nuevo León
- ¿Quieres dar un mensaje a los jóvenes edafólogos latinoamericanos?
Maestría: Programa de Edafología, Colegio de
Postgraduados
Doctorado: Programa de Edafología, Colegio de Postgraduados
Una muy ilustrativa entrevista donde nos expone la gran preparación académica que tiene la doctora Carmen y su deseo de que todo lo que el hombre aprende, descubre e interpreta sirva para mejorar la calidad de vida del ser humano y el planeta
ResponderBorrarque es nuestro hogar